Tú, pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo?
Tú que predicas que no se debe robar, ¿robas?
Tú que dices que no se debe cometer adulterio, ¿adulteras?
Tú que abominas los ídolos, ¿saqueas templos?
Tú que te jactas de la ley, ¿violando la ley deshonras a Dios?
Porque EL NOMBRE DE DIOS ES BLASFEMADO
ENTRE LOS GENTILES POR CAUSA DE VOSOTROS,
tal como está escrito.
Romanos 2:21
El señor nos enseña, el amor a Dios y a nuestros semejantes si lo practicamos podremos ser mejores ciudadanos del mundo
ResponderEliminar