¿Soy o seré?

Recuerdo que de niño quería ser astronauta, viajar por el espacio y conocer otros mundos. Algunos amigos míos querían ser policía o doctor o, en el caso de un hermano mio, futbolista. En ninguno de nuestros casos, se cumplieron nuestro deseos. Lo confieso, no soy astronauta; mi hermano no es futbolista y mis amigos no son ni policías ni doctores. Quisimos llegar ser, pero no somos. Hablando en singular: quise ser y no soy. Esto me dejó, sin embargo, algunas reflexiones, quizá obvias: no es lo mismo el seré que el soy. el soy implica un tiempo de existencia constante: soy. Sin embargo, el seré implica una inconsistencia: si siempre seré, nunca soy. Para aclarar esta mescolanza de verbos y tratar de ser prístino en mis ideas, lo diré de esta manera: "Hoy no fio, mañana sí". Quién no ha visto es esta frase colocada en la entrada de un comercio. ¿Quiere decir ese cartel que si regresas mañana si te fiarán? No, no lo harán, porque el cartel siempre dirá que hoy no, pero mañana sí. Un mañana inexistente, porque siempre es hoy, ahora, el presente - Carpe diem, diría Horacio -.  

Y ¿a qué viene toda esta perorata sobre verbos y tiempos? Pues que si se quiere representar la existencia de alguien se debe decir es; no, será, como he leído que algunos traducen el Tetragramaton (las cuatro letras que componen el nombre de Dios). Porque el nombre Jehova o Yavéh (Éxodo 3, 14), se traduce como: "Yo soy el que soy" y no "Yo resultaré ser lo que resultare ser", como se traduce en  "Traducción del nuevo mundo de las Santas escrituras", la Biblia de mis queridos amigos los Testigos de Jehová. Alguien que es eterno existe en todo tiempo, por lo cual siempre es. ¿O no?

Este fin de semana llenemos de amor y paz, y compartamos con los pequeños seres que más amamos. Que el Dios de amor y esperanza los acompañe siempre. Un abrazo.