Una vez uno de esos locos de pueblo estaba en una banca de una acera, y se reía durante mucho tiempo. Luego pasa un señor y le pregunta:
-Oiga muchacho, ¿Por qué se ríe?
Y el loco responde:
-Es que le hice una broma al chofer del bus, le pagué el pasaje y no me monté.
Un loco se acerca a la casa de otro loco, y llama a la puerta, desde adentro dicen:
- ¡No hay nadie!
Y él de afuera responde:
- ¡Pues, menos mal que no he venido!
Un loco llega a la oficina del manicomio a quejarse:
- Buenas, vengo porque mi compañero de cuarto no me deja dormir.
- ¿Por qué?, le pregunta el secretario.
El tiene complejo de motocicleta.
- ¿Y qué es lo que le molesta? ¿El ruido que él hace?
- No, lo que me molesta es el humo.
En el manicomio,Pedro le dice a Juan:
- Estoy aburrido.
- ¿Qué te parece si corremos una carrera hasta aquella pared?
- Bien, ¿Pero cómo sabremos quién llega primero?
Piensan un largo rato y Pedro dice:
- Ya sé, si yo llegó primero hago una marca con esta tiza.
- ¿Y si llego primero yo?
- Pues, ¡La borras!
Dos locos se escapan del manicomio y tienen que saltar 100 paredes, cuando van por la número 99 dice uno:
- Estoy cansado, vamos a devolvernos.
Va un loco por la calle caminando muy aprisa, y se encuentra con otro loco y éste le pregunta:
- ¿Para dónde vas?
- No lo sé, pero apúrate porque vamos a llegar tarde.
En una sala un médico observa que cuatro internados juegan a los naipes mientras otro está sentado sobre un armario. Pregunta entonces a uno de ellos:
- Y aquel, ¿Qué está haciendo?
- Cree que es una lámpara.
- Ah, ¿Sí?, eh, usted, baje inmediatamente de allí.
- Pero, ¿Qué está haciendo?, le dicen los otros enfermos, ¿No ve que en la oscuridad no podemos jugar?
Un loquito intenta escaparse del manicomio. Cuando logra salir a la calle, aborda un taxi.
- Señor, señor, lléveme a toda prisa al aeropuerto.
- A la orden, señor.
- Pero, por favor, lléveme en reversa.
- ¿En reversa?, oigame, ¿Usted esta loco?
- No estoy loco, lo que pasa es que no quiero perder el vuelo que salió a ayer.
Está un loco escribiendo una carta, entonces llega un guardia y la dice:
- ¿Qué haces?
El loco le contesta:
- Escribo una carta.
- ¿Para quién?
- Para mí.
- ¿Qué dice?
- No sé, todavía no la recibo.
Dos locos planean la fuga del maniconio, uno le dice al otro:
- Si la pared es baja la saltamos, si es alta cavamos un hoyo, ¿Entendido?
- Sí, puedes ir primero.
Pasadas 10 minutos regresa el loco y dice:
- No podemos escapar.
- ¿Por qué?
- ¡Porque no hay pared!
Estaban unos loquitos en un manicomio. Todos ellos estaban gritando:
- ¡Ocho! ¡Ocho! ¡Ocho!
Otro loquito vio que los demás estaban gritando ocho, porque habían visto un hoyo en la pared.
El loquito por curiosidad se asomó al hoyo de la pared, y cuando se asomó, le picaron el ojo y los loquitos empezaron a gritar:
¡- Nueve! ¡Nueve! ¡Nueve!
En el manicomio estaban 2 locos planeando su fuga; ya al anochecer uno le habla al otro y le dice que ya está todo listo y que tiene el móvil para escapar más rápido. El otro loco mira a su costado, ve una moto y le pregunta:
- ¿Para qué queremos una moto sin ruedas?
Y el otro le responde:
- No sea tonto, es para no dejar huellas.
Y para terminar: Piter Albeiro, uno de los mejores cuenta chistes de Colombia y América.